7 recursos del Finder que nos harán mucho más productivos

El Finder es la piedra angular de nuestro uso del Mac. Lo utilizamos para navegar por nuestras carpetas, organizar documentos y acceder rápidamente a todo lo que necesitamos en nuestro día a día. Por suerte para nosotros, esconde muchos más recursos de los que parece a primera vista. Detrás de sus opciones aparentemente sencillas, hay ajustes que, con solo un clic, pueden cambiar muy sustancialmente nuestra forma de trabajar. Recordando que las acciones rápidas del Finder pueden hacernos mucho más productivos, hablemos de 7 de estos recursos que, al configurarlos correctamente, nos ayudarán a sacarle el máximo partido al Finder y aumentar nuestra productividad.

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1. Mostrar dispositivos conectados directamente en el Escritorio

Si solemos conectar almacena ie tos USB, discos externos o tarjetas SD, tenerlos a la vista nada más conectarlos es un cambio que simplifica mucho la gestión de archivos. Podemos activar esta función desde el menú Finder > Ajustes, en la pestaña General. De esta forma, cada vez que conectemos un dispositivo, este aparecerá directamente en el Escritorio, listo para que podamos arrastrar archivos o acceder a su contenido.

Este recurso, ideal para quienes trabajamos frecuentemente con almacenamiento externo, nos permite interactuar con estos dispositivos de forma más rápida y directa, pero también mejora la gestión de los mismos. Desde el escritorio, expulsar un dispositivo para poder desenchufarlo con seguridad del equipo es tan fácil como arrastrarlo a la papelera.

2. Elegir una carpeta predeterminada para nuevas ventanas del Finder

Abrir el Finder siempre en la carpeta predeterminada de “Recientes” puede no ser lo más útil para nuestro flujo de trabajo. Afortunadamente, podemos configurar el Finder para que abra automáticamente una carpeta específica, como “Documentos” o “Descargas”. Para hacerlo, basta con ir al menú Finder > Ajustes y, en la pestaña General, seleccionar nuestra carpeta preferida en “Las nuevas ventanas del Finder muestran”.

De este modo, cada vez que abrimos una ventana nueva, ya sea con el ratón o con un simple Comando (⌘) + N, estaremos exactamente en el lugar que necesitamos. Un ajuste pequeño, pero que nos evita repetir pasos y, a largo plazo, disminuye considerablemente el tiempo de acceso a nuestros archivos más habituales.

3. Abrir carpetas en pestañas y no en ventanas

Quienes trabajamos con varias carpetas abiertas a la vez sabemos lo rápido que nuestro Escritorio puede volverse un pequeño caos visual. Una forma eficaz de evitar esto es activar la opción de abrir las nuevas carpetas en pestañas en lugar de en ventanas. Así, igual que podemos fusionar dos carpetas con el mismo nombre rápidamente, podemos organizar todo en un único espacio de trabajo mucho más limpio y ordenado.

Para realizar esta apertura, mantenemos pulsada la tecla Comando (⌘) mientras hacemos doble clic en una carpeta, y esta se abrirá en una pestaña dentro de la misma ventana. Con esto reducimos el desorden, pero también nos facilita cambiar entre carpetas abiertas, algo que podemos hacer com Control (⌃) + Tabulación, sin perder de vista el contexto de nuestro trabajo.

4. Usar etiquetas para organizar y acceder a nuestros archivos

Las etiquetas en el Finder son una de esas herramientas que, si las configuramos bien, nos permiten encontrar y clasificar nuestros archivos más rápido que ningún otro sistema. Podemos asignar etiquetas de diferentes colores a cualquier archivo o carpeta y luego acceder a estas etiquetas desde la barra lateral del Finder.

Para una mayor productividad y simplicidad, podemos personalizar qué etiquetas aparecen en el menú rápido al hacer clic derecho en un archivo. Esto nos da la capacidad de marcar y desmarcar etiquetas para un archivo y, con ello, organizar grandes cantidades de información con un sistema muy visual e intuitivo.

5. Mostrar extensiones de archivo para identificar rápidamente los formatos

Aunque el Finder oculta las extensiones de archivo de forma predeterminada, hacer que sean visibles puede ser interesante cuando trabajamos con varios tipos de documentos. Desde el menú Finder > Ajustes, dentro de Avanzado, podemos marcar la opción “Mostrar todas las extensiones de archivo”.

Así, identificamos al instante si un archivo es un PDF, un JPEG o un archivo editable, como un .docx. Este simple cambio nos evita abrir archivos equivocados o realizar búsquedas innecesarias.

6. Mantener las carpetas siempre en la parte superior

Cuando organizamos archivos y carpetas en una misma vista, puede resultar algo incómodo buscar entre ambos tipos. Con la opción “Mantener las carpetas en la parte superior”, disponible en el menú Finder > Ajustes dentro de la pestaña Avanzado, podemos hacer que las carpetas se mantengan siempre visibles en la parte superior de cualquier lista.

7. Configurar la eliminación automática de archivos de la papelera

¿Nos queda la papelera llena de archivos durante semanas o incluso meses? Activar la opción “Eliminar los ítems de la papelera al cabo de 30 días” en el menú Finder > Ajustes, y luego dentro de Avanzado, nos garantiza que esos archivos que ya no necesitamos desaparezcan automáticamente pasado un mes. Un ajuste que libera espacio y que también nos evita tener que recordar vaciarla manualmente.

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Estos siete recursos son solo una muestra de cómo podemos personalizar el Finder para que se ajuste mejor a nuestras necesidades. Con unos pocos cambios, transformaremos nuestra forma de organizar y gestionar archivos, consiguiendo un flujo de trabajo mucho más eficiente y productivo.