Max se une a la campaña contra el uso compartido de contraseñas, similar a la de Netflix

Max, el servicio de streaming de Warner Bros. Discovery, se unirá a la tendencia de limitar la compartición de contraseñas, similar a lo que Netflix ya ha implementado.

Según el ejecutivo JB Perrette, esta iniciativa estará en pleno funcionamiento en los próximos 12 a 18 meses. La medida busca instaurar un control más estricto sobre quién puede acceder a las cuentas, obligando a los usuarios que deseen compartir su cuenta con personas fuera de su hogar a adquirir un “Extra Member Add-on”.

Este add-on tendrá un costo de 7,99 dólares al mes, un precio ligeramente superior al del servicio de Netflix, que actualmente cobra 6,99 dólares para su plan básico y 8,99 $ en su plan estándar.

La estrategia de Max para frenar el acceso gratuito al streaming desata el debate

El objetivo de esta práctica es reducir el acceso gratuito a los servicios de streaming por parte de usuarios no suscriptores, una estrategia que ya ha generado controversia y debate en torno a la equidad del acceso al contenido digital.

Para que alguien fuera del hogar del suscriptor principal use la cuenta, el titular de la misma deberá activar la opción del “Extra Member Add-on”, lo que permitirá que el miembro adicional cree su propia cuenta con credenciales independientes.

A pesar de contar con su propia cuenta, la única restricción será que el miembro añadido solo podrá hacer un streaming a la vez en un único dispositivo.

Esta limitación se refleja en la intención de la compañía de conservar el control sobre el uso compartido de cuentas, restringiendo las posibilidades de acceso a múltiples personas simultáneamente.

Además, los nuevos miembros tendrán la opción de transferir su historial de visualización, recomendaciones y configuraciones desde sus perfiles existentes, lo que podría facilitar la transición para los suscriptores.

Con estos cambios, Max parece estar preparado para enfrentar los retos del mercado del streaming, buscando un equilibrio entre la flexibilidad para los usuarios y el control sobre el acceso a su vasto catálogo de contenidos.